Confesión
Esperando la muerte
Como un gato
Que va a saltar sobre
La cama
Me da tanta pena
Mi mujer
Ella verá este
Cuerpo
Blanco
Rígido
Lo zarandeará una vez y luego
Quizás
Otra:
" !Hank! "
Hank no
Responderá.
No es mi muerte lo que
Me preocupa, es mi mujer
Que se quedará con este
Montón de
Nada.
Quiero que
Sepa
Sin embargo
Que todas las noches
Que he dormido a su lado
Incluso las discusiones
Más inútiles
Siempre fueron
Algo espléndido
Y esas difíciles
Palabras
Que siempre temí
Decir
Pueden decirse
Ahora:
Te amo.
L’ultimo bacio, cerchi riparo fraterno conforto, tendi le braccia allo specchio, ti muovi a stento e con sguardo severo, di quei violini suonati dal vento, l'ultimo bacio brucia sul viso come gocce di limone, l'eroico coraggio di un feroce addio, ma sono lacrime mentre piove piove, mentre piove piove . . .
lunes, 29 de marzo de 2010
Florencia Abadi
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